El campo dorado de la claridad del sol. En gran
abundancia apuran las frutas
en el único árbol que vive aquí.
El arroyo,
con su limpieza y claridad,
se pierde en la distancia. De tanto
estar en las nubes,
con un tallo de hierba en mi mano,
se me escaparon las horas. Solo el sol
me deja seguro
que no llego tarde. Me marcho,
pensando en el lugar
que me dio la relajación que necesitaba.
¡Hasta mañana naturaleza! @Ava
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