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jueves, 13 de junio de 2024

CARTA A MI PADRE - De Alvaro Villa André (Las Crónicas de Ava)

 


CARTA A MI PADRE

 

Hola Papa.

Hace más de un año que te fuiste y sigo recordándote. No me es fácil escribir esta carta, pero quiero dirigirte algunas palabras y emociones que sentí cuando te fuiste.
Llegue a tiempo con Rosa desde Granada para acompañarte a ti y Julia la última noche en el Hospital. Yo estaba satisfecho por haber llegado a tiempo.

Tú estabas sedado, con los ojos cerrados y respirando con dificultad. Te agarraba la mano y te ponía mi otra mano en tu cabeza y empecé a hablar contigo.  Quería que no te preocuparas, yo estaba bien.  Interiorizaba en mis pensamientos las palabras e imágenes necesarias para desearte un buen traspaso de existencia.  Te decía que ibas a conocer mundos e dimensiones increíbles para poder iniciar tu andadura de viajero.

Yo ya hace más de dos años me había preparado para tu despedida. Tu habías perdido poco a poco tus recuerdos, pero cada vez que iba a verte, y aunque no me conocías, yo estaba feliz por estar contigo y que sintieras mi contacto y mi voz.  Los 9 meses que pase cerca de ti me ayudaron a comprender la perdida de tu memoria. Estaba cerca de ti, y era lo que importaba.

Siempre estaré agradecido a Belén y Mari por cómo te cuidaron en tus dos últimos años, fueron como unas hijas para ti, y Julia, tu mujer, siempre pendiente de ti, y para mí fue como una segunda madre.

Esto no es un escrito de palabras elocuentes. De cierto tuviste tus fallos y errores. ¿Pero quién no los tiene?  Yo nunca le puse demasiada importancia a eso. Fuiste un padre para mí, aún en la distancia, y en las épocas que pude visitarte.

Me enseñaste el valor del esfuerzo, y de la constancia.  A veces hubiera deseado que hubieras venido a verme, pero no pudiste, o no tuviste las condiciones. Era parte de tu personalidad y ser, y así al final me lo tomaba.

Ya viajaba yo lo suficiente por los dos.

En tu último amanecer yo no hacía más que tocarte la frente, acariciarte y hablarte.  Te fuiste en compañía de tu familia, y ese hecho es para estar feliz.  Nadie se merece morir solo.  Y te fuiste, en paz, iniciando un viaje que ni me puedo imaginar.

Manuel Villa Fuentes, mi padre, con cariño y orgullo siempre te recordare. Gracias por ser mi padre en esta existencia.

Tu hijo que te quiere.