martes, 23 de febrero de 2016

Poesía: La nobleza de la soledad


La nobleza de la soledad



En la octava avenida de los 40 y tantos ya avanzados
he sentido atravesar mi vida por diversos palos.
Algunos con espinas cortantes y dolientes,
otros, suaves como los tejidos de los tulipanes en plena floración.

Nobleza al salir solo,
nobleza al saludar a otras soledades fortalecidas
para apreciar cuando se esta con alguien.
Sin pedir, sin exigir,
respirar tu respirar.
La corriente eres tú,
el día lo cierras tú.

@ Las Crónicas de Ava

Poesia: No quiero vivir para convencer




No quiero vivir para convencer

No quiero luchar contra las dudas.
Quiero paz.
No quiero demostrar nada de lo que no siento.
Quiero serenidad.
No quiero andar semanas demostrando cosas que son.
Quiero tener derecho a que los días puedan escribir certezas sobre mí.
No quiero robar el tiempo a nadie.
Quiero compartir un melocotón para morder.
No quiero escuchar criticas constantes por que he abierto la puerta con la mano derecha en vez de con la izquierda.
Quiero simplezas y taparme feliz por la noche.
No quiero prometer millonadas de limonadas con gas que se esfuman en tragos insípidos.
Quiero dar lo que hay y no dar lo que no quiero dar. 
Así es.
No quiero justificarme en moralidades que no son las mías, aunque entiendo las tuyas.
Quiero seguir mirando emocionado un partido donde mi equipo se salva del descenso.
No quiero ya lamentarme más de abandonos o amores cambiantes, me da igual, el derecho es universal, elegir y vivir.
Quiero decir que si puedo estaré y mi abrazo también.
No quiero vestidos opulentos, ni gestos teatrales para aparentar.
Quiero despertarme con arrugas y limpiar el Cacao que vertí sin querer con mi mano temblorosa.
No quiero vivir
el último tercio de vida  de forma amargada y preocupado,
insistiendo y convenciendo a los que no quieren creerme.
Quiero escribir mi vida algún día, sin faroles y a lo puro.



@ Las Crónicas de Ava

domingo, 21 de febrero de 2016

Poesía: Mi ceniza no es de aquí


Mi ceniza no es de aquí

Rodar y arrastrar las escasas ganas que quedan por hablar.
Se que algunas revoluciones comienzan con un pequeño detalle,
pero hasta entonces siguen cayendo toneladas de girasoles quemados,
y lo peor es que me hago insensible,
de veras.
Las bajadas,
ya las espero, las subidas las vivo,
lo que duren,
y no quiero pincharme con el bolígrafo para quitar el dolor que sabe a “Te quedas solo”.

Una buena amiga es como una familia,
y si hay un beso por medio,
el día queda marcado heroicamente.

No mido si mis acciones agradan a unos y joden a otros.
Seamos claros.
Pintan bastos,
y a veces también siento mi espalda tocada con manos de miel.
Me han dicho más de una vez que no me entienden.
No se me ha olvidado. Mi ceniza no es de aquí.
Errante y valiente. Camino igual,
con parálisis y espasmos que dejo en los pasos de cebra.

Tengo labios que proyectan y no dejan engañar,
encuentran los senos precisos que me aceptan y quieren.
Dejar mi legado sobre la faz de esta tierra necesitada.
Me duele profundamente cuando por razones minúsculas
mandamos a la mierda a las personas que mas queremos.  
Si, así de claro.

@ Las Crónicas de Ava 

viernes, 19 de febrero de 2016

Poesia: Eva no salio de la costilla de Adán



Eva no salio de la costilla de Adán


¿Recuerdas?
Tiempos de sol,
a mi derecha mis padres, a la izquierda los tuyos.
Lluvia de arroz.
Me pusiste la alianza justo cuando la Luna se situó por encima de la roca de los enamorados,
y luego nos fuimos dentro de un carruaje tirado por caballos,
a una nueva vida.

¿Recuerdas?
Una noche, tras el segundo año,
volviste borracho perdido de una juerga de amigos,
te pedí que no me besaras y que te ducharas,
y cayo la primera.
Mi boca sangro y tu mano se calentó.
La primera columna se quebró,
aún así a la mañana le eche masa de cariño para restaurar,
para amansar y te excusaba.

¿Recuerdas?
Una semana después de que tú primogénito dijera las primeras palabras,

me cogiste de los cabellos para arrastrar mi cara por los suelos,
permanecí tendida en el suelo.
y me diste la puntilla rematándome con exclamaciones denigrantes.
Allí oscureció la mitad de la luz que aun veía en ti. 
Las roturas las enmendaba con la esperanza de que cambiaras.
Solo luz de esperanza.

¿Recuerdas?
El día que moriste para mí,
nuestra hija se interpuso para llevarse el puñetazo que iba dirigido a mí.
La paz entro en mi vida,
cuando borre tu nombre de mi corazón.


@ Las Crónicas de Ava

Poesía: Sucesos bajo los ojos del Halcón Universal



Sucesos bajo los ojos del Halcón Universal


Que te dejen, que dejes, que aplaces,
darte un tiempo, seguir queriendo, seguir creciendo,
echar de menos,
caminar solo y respirar, reflexionar tranquilo,
apasionarse detrás de un espejo,
tocar el manto de la espiritualidad,
sentarse en el trono y dibujar carreteras en los azulejos de la pared,
limpiar la casa para regenerarte,
evaporar los malos ambientes,
mirarte una serie donde tratas de sobrevivir sin que te muerdan,
calcular las diferentes variantes temporales de lo que hubiera pasado si hubieras sido el primero en devolver a la anciana los 50 euros que le habían caído del bolso,
hacer clic de veras cuando algo te gusta, aunque sea una letra puesta al revés,
echar saliva para limpiar la mancha de pasta de dientes que te ha caído esta mañana en el jersey de  tu hombro derecho,
hacer un All-Inn y gritar "Siiiii" al ganar con un Full-House de Treses y Doses a un Trio de Ases,
saber que vas a poder contar muchas historias verdaderas antes de palmarla.  
Todo esto sucede,
bajo los ojos del Halcón Universal.
Son muchas las razones para cerrar la puerta de tu casa y salir a la calle.


@ Las Crónicas de Ava

martes, 16 de febrero de 2016

Poesía: Este es el fin



Este es el fin

Cuando creen que atentar contra convicciones religiosas
es de lo más progresista que puede haber,
ellos mismos se habrán marcado en su espalda
 la cruz de la intolerancia.

Cuando exclaman el grito del “No a la guerra” a los cielos derrumbados,
y callan vergonzosamente cuando sus vecinos están siendo aniquilados,
este es el fin.

Cuando patrullan orgullosamente defendiendo el Arco Iris,
¿Quién defiende a las personas grises sin glamour público 
y afectadas del bloqueo y olvido institucional?

Cuando llenas el carro de la compra con víveres y caprichos,
que son 20 céntimos que podrías dejar en la mano del que te pide.
Dentro de un año podrías ser tu el que estuviera vendiendo prensa social ante los  semáforos.

Y los cuervos toman su sitio en los tendidos eléctricos.
Esperan comerse las falacias que dejamos detrás de nuestras orejas sordas.

Sensibilidades aturdidas y atrapadas en ideologías vanas y afiladas
que destripan los restos de humanismo que pueden quedar.
El raciocinio y el perdón es un peligro.

Quien quiera salvarse,
que acuda a las calas escondidas  de las costas desmemoriadas
donde aguardan los botes salvavidas que nos llevan a una Tierra aún no derrotada.

@ Las Crónicas de Ava

lunes, 15 de febrero de 2016

Poesia: Cada día me tapabas el hueco por donde entraba el aire



Cada día me tapabas el hueco por donde entraba el aire


Era el primero en meterme en cama,
miraba por ti,
esperando tu entrada.
Te desvestías y te volviste a vestir con la piel
de mi cuerpo térmico
para decir al frío que no lo querías como compañía.
Antes me cubrías el hueco con la sabana
por donde entraba el aire,
Meticulosa, cuidadosa,
admiraba la forma que cuidabas lo que es tuyo,
lo que percibías como tesoro.

Sincronizábamos las vueltas en la cama.
Mi espalda era tu lienzo donde pintabas “Historias susurradas” con tus latidos.
Sentía seguridad.
En las noches,
donde las espadas me rajaban heridas en los nervios y las piernas,
tu estabas allí vigilante,
atenta a cada espasmo repentino que me pudiera hacer caer al foso de la inconsciencia.

Círculos en tiempos perfectos,
apretaba y me acercaba por tu  espalda
para poner mis manos sobre tus senos
y darte el combustible para que irradiaras tus planetas.

Cruce de piernas y me iba contigo al Tibet de las respiraciones intensas.
Laberintos, miel.
Sabíamos vernos y querernos.

@ Las Crónicas de Ava

domingo, 14 de febrero de 2016

Poesía: 8 números y una letra

8 números y una letra


La luz encuentra,
el brillo es,
no hay vida sin riesgo,
los puentes negros revientan los miedos.

El vació se desinfla,
la censura trocea,
el desayuno te viste por dentro,
no enciendas hoy la Televisión.

Te pagan por clic,
se duplica tu cuenta,
y sales de la cueva
para ver el nacimiento de una nueva vida
que acaba de parir el camino delante de tu volante.

La visión de lo oculto,
eres un registro con 8 números y una letra,
y por lo menos hay otra docena “registrados”
a los que te gustaría ver esta semana.

@ Las Crónicas de Ava




viernes, 12 de febrero de 2016

Poesía: En Marte hubo agua



En Marte hubo agua


La simpleza es un engaño del que a menudo se hace uso
para atrapar moscas humanas sin rumbo.

No hay sal porque Galicia se queda sin Mar.
Los Alemanes deciden quedarse sin su cabeza amueblada
y nos enseñan sus uñas pintadas con colores que avecinan
la disolución de muchas fronteras. 

Derrumbo las piedras de la Alhambra,
abajo algunos me quieren linchar por eso,
pero yo solo quiero construir una torre para abrir la tripa de la Luna
y hacer llover pan cada noche.
Hay bocas con forma de O, cansadas de tragar polvo y vegetar tontamente.

Corta la corbata de un político seducido por las subvenciones
y échala al fuego.
La manteca acumulada arderá días y días.
Si sigo con esta escalada imaginativa
corro peligro de que me encierren de por vida.

Espartano es el corte que hago en mi cara,
mientras estoy absorto en divagaciones etéreas
al dudar
si Venecia se hunde o Ámsterdam se insinúa.

En los canales de Marte hubo agua,
me lo dijo un descendiente de los Reptilianos.
Quisiera saber a que manipulación genética
estuvimos expuestos hace mas de cien mil años.
Romper el bucle vicioso
para diluviar logro y libertad de pura cepa.  

@ Las Crónicas de Ava

jueves, 11 de febrero de 2016

Poesía: Sensible por doquier



Sensible por doquier

Con cantos y luz tardía de un cielo en retirada,
se me abrió el pecho y los diques reventaron.
Por fin salio un torrente de cariño.

Escúchame, mírame, léeme,
este es mi regalo:
Besos afectivos y miradas agradecidas.

M
e siento ligado a las palabras sombrías
y al esfuerzo final.

@ Las Crónicas de Ava

viernes, 5 de febrero de 2016

Poesia: Veneno lento



Veneno lento


Tímpanos abocados a oír diálogos indeseados,
desprendidos en gotas de veneno lento
que entran por intravenosa.

Sollozos no compatibles con la claridad
con la que cae el agua del cielo.

Las vidas sin huesos, mantenidas por segundos,
son las primeras en caer ante las tentaciones de la rendición.

¡Abrasa veneno!
Ya  no hay espíritu y paredes con frases de resistencia
que te impiden propagar e infectar.

No te lleva a
ninguna parte parir de tu boca vocablos de ayuda.
Silenciar las caras de tu derecha
para aliviar la presión de tu mano de plomo.
Eso es lo que queda.


@ Las Crónicas de Ava

martes, 2 de febrero de 2016

Poesia: Una amiga me recuerda que estoy lleno de versos



Una amiga me recuerda que estoy lleno de versos

Escribir desde las vísceras esta adherido a uno
 y es imposible perderlo.
Es como coger la bicicleta después de 20 años,
sin que te hayas olvidado a pedalear y avanzar con equilibrio.
También las manos vacías y las bocas selladas
dicen mucho más que S.O.S. lanzados a la desesperada.
Me he puesto el pijama,
el que cubre piernas y mecanismos de autoprotección.
Contra los achaques mucho cariño,
contra las facturas mucha constancia,
contra la soledad mucha iniciativa,
mañana prometo que no saldré sin dar gracias al aire.

Desgarras con un cuchillo la piel de las patatas-palabra por consumir.
En agua hirviendo,
tu alimento y el corte profundo que se cierra a base de actividad.
Una amiga hoy.  Un amigo ayer.
Una Rosa a la que siempre querré y cuidare.
Inconvencionalmente vivo.

@ Las Crónicas de Ava

lunes, 1 de febrero de 2016

Poesía: Autocrítica – No soy ni peor ni mejor



Autocrítica – No soy ni peor ni mejor

Escucho a un amigo hablar.
Me cuenta lo que sus ojos ven de mi,
me cuenta lo que otros percibieron de mis estancias entre ellos,
me cuenta que tal vez inconscientemente,
actuó como actuó.
Me pongo a pensar,
a bucear dentro de mis acciones.

Egoísmo, autoprotección, supervivencia,
caminar y caminar. 
Nunca me he creído peor ni mejor que los demás.
Agarro la taza y le sigo escuchando.
He tratado de prestar atención a los demás,
he tratado de renunciar a momentos que me apetecían
por estar con ellos o aquellos porque sentía que tenía que estar allí
o me necesitaban.
 
Haga lo que haga,
siempre van a aparecer voces denunciando mis procedimientos y actuaciones.
No les culpo. Agradezco saberlo.
Nunca quise ser mejor ni peor,
ya lo dije antes y lo repito como un mantra que sale de la sangre.
Quince años  de soledad no pasan desapercibidos.

Quizás un retiro no me vendría mal
y vestirme con un abrigo de tierra para volver a cargarme de humildad.
Quizás, si le preguntara a un mendigo si me puedo sentar al lado de el,
él me contaría su vida.
Tal vez, si me cortara de nuevo,
meditaría lo veloz que se puede ir la sangre y la vida.
Publicar desde el fondo,
desde un relativo anonimato,
denunciar lo que me duele, confesar mis transgresiones,
tener valor para decir “Si, tenias razón”,
podría haberlo hecho mejor.

Amigos son escasos, conocidos varios,
y todos son apreciados,
cada uno en su medida, con sus circunstancias,
en la forma de coger un bolígrafo y firmar simpatía en mis brazos.

Recojo algunos escombros,
metidos en mis reflexiones.
No necesito bautizarme de nuevo,
pero me hace bien parar y meditar.
Mañana elegiré rumbo. 

@ Las Crónicas de Ava

jueves, 28 de enero de 2016

Poesía: Viajero de “Entre vidas”



Viajero de “Entre vidas”


Parezco perdido,
creo.
¿Afortunadamente?
¿Que habrá en la página 45 de la nueva versión del calendario universal?
Cierro todo y me hago diminuto.

¡Llévame contigo pájaro no existente!
Si ese, con las alas negras.
Lo he visto, pero vosotros no.

El chocolate se deshace en mi lengua,
no para besar,
sino para sacar mi lengua desbancada.
Tengo una forma muy extraña de amar.
Ya os lo advertí.
Reviento, entrego, desaparezco,
y si has compartido mi libertad,
tú también desearas no limitarte jamás a la tierra anclada.
Es mejor que fumar un porro,
es mejor que perder orgasmos en ratos que no recuerdas.

Por favor,
córtame con tijera la etiqueta que llevo al revés.
Es una XXL.
No quiero espacios reducidos.

Por favor,
átame a una cuerda y hazme volar como a una cometa.
Si alcanzo la estratosfera,
haré caer una bola con el secreto del viajero de “entre vidas".

Es un borrador,
con chicle imaginativo pegado a mi oreja para susurrar la no rendición.

Me he reseteado algunas veces.
¿No lo entendéis?
Es un nuevo vivir y la piel se recicla.
Hoy seré compositor de sonidos astrales y de chacras gustativas.
Quiero una habitación vacía y dormir con los calcetines puestos.

@ Las Crónicas de Ava

Tocar el cielo para abrir el pozo de las palabras - VideoPoema Las Crónicas de Ava - Voz: Ángeles López Quesada



miércoles, 27 de enero de 2016

Poesía: Palitos Mikado, la única verdad para hacerme tuyo

Palitos Mikado, la única verdad para hacerme tuyo



En sábanas moradas a estrenar
te echaste como palitos mikado 
para que extrajera tus puntos de placer
sin que se cayera tu entorno,
sin que se derrumbasen los puentes
que te permitieran alcanzarme en mi isla oculta,
flanqueada por versos-minutos, por frases bohemias.

En abrazos de sexo-marea te revelé mis fotos del pasado,
aquellas en blanco y negro que permanecían solas
en mi recuerdo,
hasta que tus ojos retrocedieron conmigo todos esos años,
tú y yo en el mando de la máquina del tiempo.
La mirada-cremallera a un palmo de los labios,
aguardando con templanza y con dominio la entrega del momento de la revolución.

No olvidé Togo, ese alargado país colocado como un frontón
entre sus naciones vecinas,
no olvidé la mano mochilera que trata de dibujar el billete
para viajar, para hacer caso a la voz interna que pide distancia-bésame.
Y me alargué, como Togo,
para envolverte en papel aluminio invisible,
penetrante en destellos de placeres,
para ser protegida a la velocidad ultra sueño que te llevaban mis atrevimientos.
Conoces el peligro de un Poeta que rompió lazos con la nada.

Atravesaste mi doble mundo.
La proeza del cariño que cedo a la entrega del  animal puro,
las palabras-pergamino de orificios de oro
para entrar en las agujas de un Maorí expandido.
Y tuve tu vida en mis manos,
al tocarte, al liderar la rebelión de tus neuronas cansadas
para conquistar ese castillo-corazón que se puso a tu alcance.
Apriétame, golpéame, arráname, respírame, protégeme, adórame,
porque esa es la única verdad que puede hacerme tuyo.


@ Las Crónicas de Ava

martes, 26 de enero de 2016

Poesía: La expansión de las ideas liberales



La expansión de las ideas liberales


Al azar abro páginas,
con carga emocional.
Sin
determinadas pautas inicio historias
para
partirme la boca y defender mis causas liberales.


Mato poesía,
parto lápices,
me cargo a borrones palabras escuchadas con hartazgo,
aquellas como alma o corazón.
Desterradas con grafito.  

Alzar la mano,
sin efectos cinematográficos de los años 40,
para crecer y decir verdades. 
El siglo XXI me invita a declamar y anunciar
el derrumbe de la propaganda anacrónica.

Un trabajador es libre de querer ser lo quiere ser,
eso conteste.
No heredo etiquetas prefabricadas.
Las ideas pares e impares pueden mezclarse 
y generar prole expansiva,
sin cargas de muertos o libros ideológicos mastodónticos.
@ Las Crónicas de Ava

Cuestión de principios . VideoPoema de Las Crónicas de Ava. En la voz de Mariana Navarro




Ness Belda presenta a Alvaro Villa Andre en Valencia




Ness Belda presenta a Alvaro Villa Andre y su segundo Libro: Pelo mandarinas para ti.
BiblioCafe, Valencia.  21 de Enero 2016


sábado, 23 de enero de 2016

Poesía: Trazos con o sin azúcar



Trazos con o sin azúcar


Los años trazan en una botella de Coca Cola
un desplome anunciado.
Un cuerpo que vibra a cien mil expresiones por semana,
no atesora capacidad para derrumbar puentes,
en cambio si se hace negro.

Dar la espalda es una libre elección,
o con azúcar o solo,
los dados se echan dentro de los ojos.

Solo hay unos palmos de distancia
para hacer diluviar verdad de pura cepa.

@ Las Crónicas de Ava