Tocar el cielo para
abrir el pozo de las palabras
Con esta
escalada imaginativa
escucho el caos de las voces altas.
escucho el caos de las voces altas.
La fiebre
de la bufanda de algodón y sus respectivas caricias
deja sin argumentos a los fundamentalistas del amor prostituido y vomitivo.
Una vez que abro la boca
sale ese beso que te marca heroicamente.
No desestimo el abrazo que me une con las otras energías que recibo,
especialmente con tus senos.
Vivir los 40 y tantos como una confirmación.
Dormir, soñar y hacer.
Una acción conocida.
Tiro la muleta para caminar por encima del mar.
Puedo reducir o aumentar los pasos,
solo es una cuestión de corazón, voluntad y de a donde quiero ir.
deja sin argumentos a los fundamentalistas del amor prostituido y vomitivo.
Una vez que abro la boca
sale ese beso que te marca heroicamente.
No desestimo el abrazo que me une con las otras energías que recibo,
especialmente con tus senos.
Vivir los 40 y tantos como una confirmación.
Dormir, soñar y hacer.
Una acción conocida.
Tiro la muleta para caminar por encima del mar.
Puedo reducir o aumentar los pasos,
solo es una cuestión de corazón, voluntad y de a donde quiero ir.
Romper el bucle vicioso del día,
prescindir de lo que sobra es uno de los retos.
No habrá imprevistos ni zancadillas de duendes puñeteros
que puedan impedirme este viaje.
Sacar el diablo de lo que llaman alma
y estamparlo contra el papel al escribir versos sin freno.
para abrir los pozos de las palabras.
Una bola negra intensa
hace
caer las estrellas fugaces.
Una
y otra vez
hasta que salga el agua.
hasta que salga el agua.