Agrando el mundo
contigo
Es sábado,
de mañana.
Me gusta deformarte en la cama,
usar tu cabello entre mis dedos
untarme con tu deseo recién despertado.
Me gusta masajearte como barro
para que puedas elegir los colores
y la obra que haré de ti hoy,
la que nace en mis ojos de "Agrandamundos".
Eres una dimensión que se multiplica en varias realidades alternativas,
para hacerlas nuestras,
para conquistarlas,
para domarlas con el fuego de la madera cortada de los Totems derribados.
Por eso me gustas,
por eso subiste la cuerda que te lancé
desde mi atrevimiento extranjero.
Te huelo, te froto,
te amo con todas las consecuencias de un sábado matutino.
Entregados.
Querida amada, querida compañera.
Esto es un pedazo de libertad consolidada.
Esto es la riqueza que hace del deseo un arma difícil de arrebatar.
@ Las Crónicas de Ava