Contigo no pasare jamás
hambre de cariño
su comprensión, su mimo,
para sellarse definitivamente en el corazón de los implicados.
Yo te decía ven, y tu venias
Tu me decías sigue, y yo seguía.
Llegamos a un punto y descansábamos.
Y ante nuestros ojos vimos todo el territorio explorado.
Te conté que hoy me miro una anciana y yo a ella
y a media distancia de ella, a media distancia de mi,
nos dimos por segundos un abrazo de simpatía y todo fue posible,
un pequeño micro mundo instante para sentir la improvisación compartida.
Ambos afirmamos con la mirada.
Tu me decías sigue, y yo seguía.
Llegamos a un punto y descansábamos.
Y ante nuestros ojos vimos todo el territorio explorado.
Te conté que hoy me miro una anciana y yo a ella
y a media distancia de ella, a media distancia de mi,
nos dimos por segundos un abrazo de simpatía y todo fue posible,
un pequeño micro mundo instante para sentir la improvisación compartida.
Ambos afirmamos con la mirada.
Mirada Poesía de Mujer...
… y cuando la recibí cayó el muro de mi Jericó interior,
partí el mana de mi corazón contigo
para no pasar jamás hambre de cariño.
@ Las Crónicas de Ava
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