DESRADICALIZACIÓN
Antes,
discutías por todo, no dejabas hablar,
y te enfadabas si no te daban la razón.
Hoy,
aprendiste a escuchar, a concienciar mejor tus respuestas,
y a entender que no pasa nada si no piensan como tú.
En el pasado criticabas a los que no se pinchaban,
y si estabas en el lado opuesto, tachabas de ignorantes a los que cedían.
Hoy en día
comprendes,
que en situaciones así, ya bastante difícil es para alguien tomar una decisión
acertada,
y lo que queda es respetarla, y seguir adelante.
Antes
tachabas de fachas o totalitarios
a los que no pensaban como tú.
Hoy, te las suda completamente lo que piensa cada uno.
Tú ya tienes suficientes planes y ganas con seguir con tu propia vida.
No te concierne meterte en la vida y en los pensamientos de los demás.
Tiempo atrás, creías que tu fe y religión era la única verdadera,
y que los demás estaban condenados al ostracismo y la perdición.
Hoy en día sonríes, y defiendes que cada uno puede creer o dejar de creer.
El universo es tan amplio y extenso como para dejarse clavar en doctrinas
paralizantes.
Años
atrás gritabas lleno de rabia por tu trozo de terreno y te introducías cada vez
más en el remolino del odio hacia los que no compartían tu bandera estrellada.
Hoy te encanta viajar, conocer culturas, no te atas con banderas,
y te sientes bien como un habitante más del tercer planeta del sistema solar.
Antes, para defender tu sexualidad, atacabas o insultabas a otros sectores, y perdías
fácilmente el norte a la hora de pedir respeto para tu grupo, cuando no hacías
lo mismo con los demás.
Ahora
perfectamente sabes, que en todas las sensibilidades y direcciones hay
extremistas y enemigas de la convivencia. Pero que también en todos los lados
te puedes encontrar con seres maravillosos y equilibrados con los que da gusto
tomarte una cerveza.
Años atrás estabas en un punto distante, buscando, intentando localizar tu camino.
Y mírate hoy al espejo. Tienes tus manos
tranquilas, tu mente en equilibrio, y tu corazón con muchas ganas de vivir episodios
memorables.
Per aspera ad astra.
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