lunes, 9 de junio de 2014

Poesía: Desabróchate



Desabróchate

Avisto blusa en fase de desabrochado,
entrevés mis carnales discernimientos
al abrir uno por uno los botones que mantiene en elegancia fetiche
la tela adherida a tu cuerpo.
Como un lince escurridizo cazo los momentos oportunos
de tu proximidad diaria para rozarte y sentir fricción entre tu, entre yo, entre nosotros,
y en medio oler el tejido suave para ronronearte como felino domado
al lado de su femenina atraída.

Aprieto por doquier adaptando tu cuerpo a la moldura
de la mesa de roble.
Variamos de presa,
agarras  y no sueltas,
te contradigo clavando tus manos a la claridad de mis intenciones.
Me maldices, me injurias, me fuerzas, me muerdes
 y después de todo sabes que al final nos vamos a quedar exhaustos,
recogidos, rendidos y entregados
en la última esquina en la que este mundo nos iría a buscar.

@ Las Crónicas de Ava

Poesía: Y hablamos de morir



Y hablamos de morir

Y hablamos de morir,
cuando ya sientes los pasos cercanos
y tu espíritu vivo desea descansar, desea elevarse, desea irse en paz.

Y si, hablamos de morir,
con esa paz que te abarca toda la vida que has vivido,
todos los se
res que has amado,
hablamos de morir cuando pensamos en la inminencia de la bajada del ángel
que te agarra la mano y te lleva seguro.

Hablamos de recordar a padre y madre,
a hermano y hermana,
al habla nocturno que hacías en confianza con las existencias que cruzaron tu camino.


Te quedas sin remordimientos,
sin odios,
sin esas cuentas pendientes por no haber llegado a tiempo para decir "Lo siento"
y al recordar te haces mar salado en una gota de agua dulce
porque tu sabes que algo has dejado,
algo has amado en aquellos que te has entregado.


Podría ser que nacieras con alas invisibles, y te las cortaran,
aún así no podrías reaccionar de otra manera
que la de seguir caminando con los pies de la esperanza.


Incluso cuando más te dolía,
cuando te dejaban, tú abrías otro amanecer,
otra sonrisa, otras de tus trastadas,
y sentabas cátedra y ejemplo de la torre en la que se podría confiar.


Y hablamos de morir,
cuando es el tiempo de decir Adiós,
de decir “Os Quiero”,
de seguir viviendo en los recuerdos y los poemas.

@ Las Crónicas de Ava

domingo, 8 de junio de 2014

Altered Tensions - Things Change Swiftly



Poesia: Estado Neutro



Estado Neutro

Los estados neutros son extraños.
Ni vives, ni mueres,
es una extensión indefinida del mecanismo de un respirar autónomo,
solo tiene la función de prorrogarte más allá del deseo, del temor,
solo tiene la función de convertirte en pared pasiva
para los que apoyan sus manos sobre ella.

Eres neutro máximo,
el día te impregna con impermeabilidad,
ni dejas ni emites.

Nulo, cero, y si r
estas no queda nada,
y si sumas no hay vivencias que añadir.
No me es desconocido este periodo de ausencia,
estos guiones bajos que crean lagunas en los registros de mi mente.

Piedra dura, eso parece.
Y si no fuera por mis dedos al rozar con mis otros dedos,
diría que soy insensible,
diría que me evaporo indefinidamente hasta que la Tierra se quede planeta rocoso y estéril,
sin agua, ni motivos.

@ Las Crónicas de Ava

jueves, 5 de junio de 2014

Poesia: Exterminio del sentir



Exterminio del sentir

Sientes,
te matan,
amas,
te exterminan,
das,
te expolian,
acaricias,
se acobardan.

En el suelo solo hay mantas de plomo,
con las cual abrigarte y ahogar el nacimiento
de cualquier indicio que despierte un cariño o una esperanza.
Estas en el campo de exterminio,
tu vista cuelga de un mástil sin reloj que muestre vida,
el corazón clavado a velocidad congelada
para no desear ni para adelante, ni recordar para atrás.

@ Las Crónicas de Ava

Poesia: Deseo la mordedura



Deseo la mordedura

No necesito boca de humano,
al adentrarme con besos de fricción en los núcleos de tus células
receptivas.
Es con esa forma que tengo de verte que va más allá de la visión
física,
con la que te dejo mi presencia en los canales emocionales de tu
consciencia

No necesito ser Adán que copia la mordedura prohibida,
tu ya me varías y descompones cada día al tocarme de entrada,
al perpetuarte en mí, de salida.

Y siendo de habla cortada,
de falta de aire cuando pretendo declararme,
finalmente sale la masa continua de las palabras precisas
y te digo, te confieso,
te atravieso a ojo-palabra dicha sin prisa
que te quiero, que te deseo,
que lo hacemos en Pi y en Zeta,
que lo hacemos con cualquier receta.

@ Las Crónicas de Ava