sábado, 5 de octubre de 2024

NO NECESITO DE MUCHO PARA SONREIR - Poema de Las Crónicas de Ava (Alvaro Villa André)


 

NO NECESITO DE MUCHO PARA SONREIR


No llevo zapatillas cuando voy  por mi casa,
necesito sentir los pies en el suelo,
deslizarme sobre él,  cuando estoy eufórico,
o simplemente tirarme al lado de sofá
y ponerme a mi perra querida
sobre mi pecho para sentirla respirar,
y verla con esos ojos negros de amor perforador.

Necesito ser yo a menudo,
y dejar colgado en alguna parte
el traje invisible que llevo cuando salgo a la calle.

Puedo decirlo,
ahora que estoy desnudo para sincerarme delante de la pantalla.
A veces estoy cansado de intentar revivir y echar fuego de buenas intenciones
a las amistades que se están apagando lentamente.

Y es la pura verdad,
siento desgaste,  siento vació,  siento distanciamiento,
al escuchar siempre las mismas dinámicas de explicaciones moralmente correctas,
y anímicamente estériles.

Cierro los ojos y me dejo ir,
para ir a correr junto con los lobos siberianos 
que vienen para recordarme que aún me queda mucha esencia de querer vivir,
y comerme la vida gusto.

Me conocen por mi constante energía,
por mi sonrisa a mal tiempo,
por ser un buen amigo simplemente.

Pero a ratos también me siento débil,
como descargado y desanimado.
Son micro ratos en el reloj biológico.

Y si, a veces me sumerjo como anónimo,
entre masas de gente que no me conocen.
Escucho, observo,
y me dejo sorprender por algún hola inesperado.

Mi cara no necesita mucho para sonreír.
No necesito mucho para volver a recuperar.
Solo un poco de tiempo.
Nada más.

Y en 500 años me seguirán leyendo.